MEMORIA DE INTERVENCION DEL TEMPLETE Y
TRONO DE NUESTRA SEÑORA DE LA
CRUZ
La intervención llevada a cabo
por este obrador de talla en madera sobre el trono y baldaquino de Nuestra Señora de la Cruz, patrona de la cercana villa malagueña de Benalmádena, ha consistido en dos acciones principales. Por una parte, el dorado en su totalidad del templete del trono en el que
procesiona la imagen de la
Virgen, y de otro lado la realización de un nuevo cajillo para el trono.
Debido al mal estado en el que se encontraba el templete,
motivado principalmente por habérsele aplicado diversas capas de pintura dorada
de baja calidad, se habían perdido múltiples detalles y calidades de la talla de esta
pieza. Por ello, se procedió en primer lugar
a devolver la madera a su estado original eliminando los repintes, así como las
manos de estuco primitivas, con lo que se dejó todo el conjunto a madera vista.
Una vez finalizada esta fase, se procedió a reforzar y entelar las tallas para
evitar la aparición de nuevas grietas o fisuras en las mismas por el uso de este elemento arquitectónico. Por último
se volvió a dorar y bruñir de nuevo todo el conjunto en oro fino de alta
calidad.
En cuanto al nuevo cajillo para el trono, se le han incorporado cartelas y elementos ornamentales para un mayor
enriquecimiento visual y armonía estética de todo el conjunto, así como una
peana para Nuestra Señora de la Cruz. Igualmente se procedió al dorado con la
misma calidad que el empleado en el templete.
Para finalizar, indicar que a nuestro parecer ha sido una intervención en la que se ha pretendido desde el primer momento, tanto respetar lo existente
como mejorarlo y enriquecerlo, sin
incorporar elementos disonantes que menoscabasen la historia de este singular conjunto
patrimonial.
Virgen de la Cruz en el templete del siglo pasado (destruído)
Estado del trono antes de la intervención